"La respiración pasa por el interior de la
cabaña y penetra en el dantian".
"La esencia Jing y la energía Qi se
hacen fuertes en el interior del dantian"
La palabra dantian significa, literalmente, Campo (tian)
de Cinabrio (dan). El carácter tian simboliza un campo dividido en cuatro
parcelas y representa un área de cultivo extensa que debe ser trabajada. Dan designa
al cinabrio o sulfito natural de mercurio (HgS), de donde se extrae éste
último. Es un mineral rojo, muy abundante en el Sur de China, que se usaba en
antiguas ceremonias mortuorias. En tumbas fechadas hacia el siglo VI a.C. se
han descubierto importantes cantidades de este mineral. Para la medicina china siempre
fue un elemento esencial y los antiguos alquimistas chinos lo equiparaban a la
Piedra Filosofal: una especie de píldoras de la inmortalidad que podían otorgar
salud y longevidad. De aquí, precisamente, viene la traducción alternativa de dan como
"elixir".
En la antigua escritura oracular china grabada en
huesos de animales o caparazones de tortuga, el carácter dan representaba
la entrada a una mina o un pozo, marcada por un cuadrado hecho con cuatro vigas
de madera, en cuyo interior se encontraba el preciado mineral, simbolizado por
el punto central. Este carácter polisémico significa literalmente porción o
píldora, aunque también designa al color rojo y finalmente ha llegado a
denominar a la propia alquimia china. Al calentarse, el cinabrio llega a ser
altamente tóxico e incluso mortal, si bien puede llegar a ser asimilado en
dosis pequeñas, permitiendo a quien lo ingiere desarrollar cierta tolerancia si
se aumentan las dosis de modo gradual. Sin embargo, existe una larga lista de
alquimistas, médicos e incluso varios emperadores que murieron al ingerir este
peligroso mineral. La primera mención del dantian aparece en un texto taoísta
de los siglos I-III d.C., el Clásico del Patio Amarillo, uno de los textos
fundamentales del Taoísmo, también relacionado con la creación del arte del
Taiji.
A partir de los siglos III y IV d.C. es cuando se
comienza a hablar de tres dantian diferenciados. En la monumental y exquisita
obra alquímica Baopu zi, del médico, mago, artista marcial, intelectual y
taoísta Ge Hong (c. 283-343), se habla por vez primera de tres dantian
concretos: el Campo Inferior del Elixir, en el abdomen; el Campo Medio del
Elixir, debajo del corazón y el Campo Superior del Elixir, entre las cejas.
Según el taoísta, el Laozi Zhongjing se
explica que el dantian se sitúa a tres pulgadas por debajo del ombligo, y que
"es la raíz del ser humano, el lugar en donde se recogen la esencia y el
espíritu, el origen de las cinco energías y la residencia del embrión. Los
hombres atesoran en él su esencia (semen); las mujeres atesoran su
menstruación. Preside el nacimiento y es la puerta de la armonización del yin y
el yang".
Los antiguos practicantes de Qigong y taoísmo, los
maestros de artes marciales y los adeptos a la meditación experimentaban una
peculiar sensación de calor en la parte inferior del abdomen mientras
intentaban alcanzar un estado de relajación y tranquilidad enfocando su
intención en esta parte del cuerpo. Para aportar una explicación lógica y
"científica" a este fenómeno, pensaron que la sensación que sentían
era similar al calor producido por la preparación del elixir de la inmortalidad
(dan), que habían estado buscando en los hornos alquímicos, y decidieron
bautizar como dantian (campo que produce el elixir) al bajo abdomen.
Así, establecieron tres centros energéticos principales, uno para cada uno de los Tres Tesoros:
Dantian inferior (xia dantian): calienta y vaporiza
el Jing, la esencia, término que se refiere a los componentes materiales del
cuerpo.
Dantian medio (zhong dantian): fortalece y purifica
el Qi, la energía, es decir, el flujo de información homeostática responsable
de la salud.
Dantian superior (shang dantian): concentra y calma
el Shen, la parte espiritual del ser, generada y controlada por la psique.
Puesto que cada persona puede percibir sensaciones en
zonas anatómicas diferentes, existen opiniones diversas sobre la localización
de los dantian, que dependen en gran medida de la percepción individual y el
tipo de sensibilización practicado. Los practicantes deberían olvidarse de
puntos concretos, y no empeñarse en situar al dantian a dos o cuatro dedos o a
tres pulgadas por debajo del ombligo. La zona del dantian es por definición un
área amplia, y no se debería fijar de un modo radical.
De los tres dantian, el más importante en el
Taijiquan y en la mayor parte de métodos del Qigong chino es el situado en la
zona infraumbilical, que incluye órganos vitales y es el punto de partida de
diferentes meridianos por los que fluyen la energía y la sangre, como los
grandes canales Renmai, Dumai, Chongmai y Daimai. Dada su importancia, cuando
los profesores de Taijiquan y Qigong hablan del dantian suelen referirse a este
centro abdominal concreto. Cuando se recomienda a los alumnos "hundir la
energía en el dantian" (qi chen dantian), no se les está pidiendo que
fuercen la respiración hacia el abdomen (puesto que sólo los pulmones pueden
aceptar aire), ni que muevan la pared abdominal mediante contracciones
musculares, sino que presten atención al movimiento regular, amplio y relajado
de la zona abdominal para permitir que el diafragma aumente su capacidad de
movimiento y los pulmones puedan ventilar con más eficacia, con lo que además
se realiza un beneficioso masaje a los órganos internos y se despierta una
sensación de plenitud y tibieza que permite realmente imaginar que una
corriente de energía sanadora penetra en el dantian.
Diferentes experimentos clínicos han demostrado que
la estimulación del dantian produce efectos directos sobre los sistemas
nervioso y endocrino, y que puede regular la función de algunos órganos. En el
plano psíquico, la concentración en el dantian se utiliza como catalizador para
inducir estados de tranquilidad mental. Al centrar la atención en una zona
concreta, se pueden crear focos controlados de excitación en la corteza
cerebral mientras que se pueden inhibir las funciones en otras zonas de la
misma, creando un efecto de protección muy útil en el campo terapéutico.
Resulta curioso que la situación tradicional de los
Campos del Elixir coincida con lugares anatómicos precisos donde algunas
arterias principales se bifurcan en forma de Y. Esto se conoce como
"anastomosis". Así, el dantian superior, situado en el cráneo,
coincide con el punto en el que el tronco basilar se separa en las dos arterias
cerebrales posteriores. El dantian medio (en la zona umbilical según nuestro
estilo) se sitúa exactamente sobre la anastomosis de la arteria aorta, en el
punto en el que ésta se divide en dos para transformarse en las arterias
iliacas primitivas y dirigirse hacia las piernas. En la mayor parte de
escuelas, se refieren a este dantian como el inferior, y denominan dantian
medio al centro energético situado bajo el corazón, que tiene una estrecha
relación con la bifurcación del tramo del tronco celíaco de la arteria aorta
abdominal hacia las arterias esplénica (izquierda) y hepática (derecha). El
dantian inferior se localiza cerca de la próstata en los hombres y en la
proximidad del cuello uterino en las mujeres, donde se encuentra la división en
forma de Y de la arteria umbilical.
Cuando la sangre golpea las paredes de estas Y durante
su circulación y se divide en dos corrientes distintas, posiblemente provoque
ciertas turbulencias que alteren el flujo de nutrientes y partículas esenciales
para el mantenimiento de la salud. A la inversa, también es probable que
distintos problemas de salud provoquen tensiones en estas zonas, generando
turbulencias y "remolinos". Los ejercicios de relajación y meditación
sobre los dantian pueden provocar un efecto regulador de dichas turbulencias,
favoreciendo una circulación sanguínea ordenada y equilibrada, enviando un
flujo de información correcto a distintas zonas corporales, reduciendo el caos
y restableciendo el orden en forma de salud y bienestar.