El tai chi o taichi chuan es un antiguo arte
marcial chino el cual se basa en movimientos relajados y armoniosos combinados
con la respiración y la concentración mental, también se fundamenta en
conceptos de la Medicina Tradicional China, y de la filosofía taoísta de
la antigua China como son la circulación del qi(chi), los meridianos
de acupuntura, la teoría del yin y el yang, la ley de los cinco
elementos, etc.
El tai chi es una de las artes marciales
internas, adscritas a Wudang (montaña) con una muy antigua tradición
taoísta en China por contraposición a las artes marciales externas cuyo
mayor exponente está en Shaolin. En este sentido es también un
sistema de autodefensa.
Forma parte del cultivo espiritual taoísta ("xiu
lian"), por el carácter meditativo que posee su ejecución, así
como otras características avanzadas.
Tai chi es una simplificación de su nombre: taiji quan (pronunciado aproximadamente "tai chi chuan")
El Taiji tiene trece posturas principales: ocho fuerzas y
cinco pasos, y cada una está conectada con un meridiano o canal energético.
En el hombre los principales canales energéticos son doce:
seis meridianos yang y seis yin. Se los agrupa por parejas según la cantidad de
energía que circula por ellos, y constituyen una red de vías por donde circula
el Qi. En chino los canales se denominan jingluo, es decir, meridianos
principales o jing que atraviesan el cuerpo de manera vertical, y sus
colaterales o luo, que lo cruzan horizontalmente.
La energía se inicia en el Pulmón, porque la inspiración es
el primer movimiento que realizamos al nacer. Después pasa, por orden, al
Intestino Grueso, Estómago, Bazo, Corazón, Intestino Delgado, Vejiga, Riñón,
Maestro del Corazón, Triple Calentador, Vesícula Biliar e Hígado, donde
reinicia el círculo.
En los brazos hay tres meridianos yin, que circulan desde el
pecho hacia los dedos de la mano. El Corazón termina en el dedo meñique;
Maestro del Corazón o pericardio en el dedo anular y el Pulmón en el pulgar. Y
existen tres canales yang, que parten de la punta de los dedos, pasan por el
dorso del brazo y terminan en la cabeza. El Intestino Grueso va desde el dedo
índice hasta la nariz; el Triple Calentador, desde el anular hasta la oreja, y
el Intestino Delgado, del meñique al ángulo externo del ojo.
En las piernas hay tres meridianos yin y tres yang. Los
canales yin comienzan en los pies, ascienden por la cara interna y van al
abdomen o al tórax: el Bazo va desde el dedo gordo al pecho; el Hígado, del
segundo dedo al pecho; y el Riñón, desde la planta del pie hasta el pecho. Los
tres canales yang comienzan en la cabeza y terminan en el pie, pasando por la
cara externa y posterior: el Estómago va desde la cara hasta el tercer dedo del
pie; la Vesícula Biliar, desde la cabeza al pecho y de ahí hasta el cuarto
dedo; y la Vejiga, desde la cabeza al meñique del pie pasando por la espalda y
parte posterior de la pierna.
Antes hemos dicho que el Taiji tiene trece
movimientos principales y que se corresponden con cada uno de los meridianos,
que son doce. Entonces ¿nos sobra una postura? De ninguna manera. El movimiento
número trece es la síntesis de los otros doce y corresponde con el wuji.
Se dice que el Taiji es el estudio de la energía en los doce meridianos y su
síntesis en el vacío. En el Taiji Quan se busca hacer caer en el
vacío al contrincante para que pierda su centro de equilibrio. La actitud
básica es ceder, neutralizar, mantenerse pegado al otro y estallar como un
látigo. Para lograr este objetivo marcial, el Qi debe moverse libre y
suavemente por el cuerpo, que debe permanecer relajado desde la piel hasta la
médula ósea. Así los movimientos son blandos, pero la potencia está contenida
en su interior.
Los chinos comparan los meridianos con ríos alimentados por
lagos o reservas. A estos almacenes de energía se les llama meridianos
extraordinarios o vasos maravillosos. De los ocho, los más conocidos son el
Vaso Gobernador y el Vaso de la Concepción, porque la unión de ambos forma la
órbita microcósmica, la pequeña circulación de la energía. Ambos nacen en el
hipogastrio, afloran en el perineo y ascienden hasta la cabeza, y constituyen
la primera vía de Qi a desarrollar en las prácticas de zhan zhuang.
Los vasos maravillosos están en relación directa con el Qi
original, regulan la energía (Qi) y la sangre (xue), conectan los doce
meridianos principales y, cuando el Qi comienza a acumularse, lo hace en estas
reservas de energía.
En concreto los ocho vasos son:
- Du mai o vaso gobernador - reserva de energía yang,
- Ren mai o vaso concepción - reserva de energía yin,
- Chong mai, vaso central - mar de la sangre,
- Dai mai, vaso cinturón - único vaso horizontal,
- Yang qiao mai - controla la movilidad yang (vigilia),
- Yin qiao mai - controla la movilidad yin (sueño),
- Yang wei mai - une los meridianos yang,
- Yin wei mai - une los meridianos yin.
Cada uno de estos vasos maravillosos se relaciona con un
trigrama del Bagua, el estudio de la energía desarrollado por los chinos y
que se expresa en las líneas enteras, yang y partidas, yin. El sistema de los
ocho vasos maravillosos es el método que sigue el Baguazhang para
movilizar la energía y, a través de las ocho palmas básicas, cultivar, acumular
y utilizar el Qi para el combate, la curacion y la vida espiritual.
L
Los antiguos chinos describieron el universo en función de
cinco energías, que expresaban los cambios del yin y el yang.
En el ciclo de creación la energía inicial, la madre, es el
agua porque es nuestra fuente de vida. Del mar surge la semilla para las
plantas que origina la segunda energía, la madera. Cuando ésta se seca y se
quema da origen a la tercera energía, el fuego. El fuego, en forma de cenizas,
alimenta a la cuarta energía, la tierra. De las entrañas de la tierra surge la quinta
energía, el metal, que a través del oxígeno y el hidrógeno origina el agua,
volviendo a iniciarse el ciclo. Cada energía se ocupa además de controlar a
otra. Así el agua apaga el fuego; el fuego funde el metal; el metal corta la
madera, la madera sujeta la tierra, y la tierra detiene el agua.
En el cuerpo cada fase contiene un órgano yin y otro yang.
Así, en el agua, la energía ancestral y fuente del Qi original, el órgano yin
es el Riñón y el yang es la Vejiga. En la madera, que representa la capacidad
de actuar y tomar decisiones, el órgano yin es el higado y el yang la Vesícula
Biliar. En el fuego, que calienta el cuerpo, el Corazón y el Maestro del
Corazón son yin y el Intestino Delgado y Triple Calentador son yang.
En la
tierra, que nutre y sustenta, el Bazo es yin y el Estómago yang. El metal, o
motor del Qi, comprende el Pulmón yin y el Intestino Grueso yang.
El Xingyiquan utiliza específicamente cada una de
estas energías como táctica para penetrar en la esencia vital de cada
practicante y lograr fundir los cinco elementos en un solo movimiento, que
representa la unidad total, el wuji.
El Xingyiquan, el Baguazhang y el Taijiquan
trabajan sobre los doce meridianos, los ocho vasos maravillosos y los cinco
elementos. Aunque difieren en la forma de enfocar estos conceptos su meta es la
misma: cultivar la esencia vital y conectarse con el origen. Ocurre igual con
los estilos externos, ya que persiguen el mismo fin, aunque sus métodos vayan
de lo duro a lo suave, del yang al yin. El camino varía, pero no así el
objetivo. Si perdemos de vista esta idea discutiendo o peleando para ver cuál
de los estilos es mejor, ello significará que no hemos comprendido nada.
Gracias por esta informacion me a echo querer aprender mucho mas de este arte tan fino
ResponderEliminarGracias , me gustó!
ResponderEliminarMuchas gracias, vuestro contenido ha sido maravilloso y me ha permitido estudiar y reforzar bastante de lo aprendido años atrás en un Diplomado de Medicina Tradicional China
ResponderEliminarTengo 34 años que me inicie en la acupuntura, posterior a realizar curso en Caracas con dr Teodorico Saguaya y de alli a la fecha ,la he practicado con resultados favorables
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